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Huesos que componen el tórax
Esternón
El esternón es un hueso plano, situado en la línea media anterior del tórax y de fácil acceso para realizar una punción esternal con el fin de obtener una muestra de médula ósea para analizar el tejido hematopoyético (en donde se forman las células de la sangre).
En él se distinguen 3 partes: (1) el manubrio o mango, que es la parte superior, ancha y gruesa del esternón y presenta en su parte superior la horquilla esternal; (2) el cuerpo, que es la parte intermedia y la más larga de las tres y se articula con el manubrio por la articulación manubrio-esternal que es una articulación fibrosa reforzada por ligamentos anteriores y posteriores. El manubrio y el cuerpo se encuentran en planos diferentes y forman el ángulo esternal, que se sitúa a nivel de la segunda costilla de cada lado, por lo que es una guía para contar las costillas; (3) el apéndice xifoides, que es la parte inferior del esternón y la más pequeña y variable de las tres. Se articula con el cuerpo por una articulación que se osifica, aproximadamente, en la cuarta década de la vida.
Costillas
Las costillas son huesos planos y alargados que forman la parte más extensa de la caja torácica. Habitualmente hay 12 pares de costillas.
Una costilla típica consta de 4 partes: (1) la cabeza que es la parte más posterior de la costilla y presenta dos carillas articulares para articularse con los cuerpos de dos vértebras torácicas contiguas; (2) el cuello, entre la cabeza y la tuberosidad; (3) la tuberosidad que se articula con la apófisis transversa de la vértebra torácica correspondiente; (4) el cuerpo que forma la mayor parte de una costilla y se dirige primero hacia atrás y, al llegar a unos 5 cm de la tuberosidad, gira hacia adelante realizando una curvatura que es el ángulo de la costilla.
En la superficie interna del cuerpo de cada costilla y cerca de su borde inferior, se encuentra el canal costal por donde pasan la arteria, la vena y el nervio intercostales que acompañan a cada costilla y que se colocan según la regla nemotécnica: V A N. Es decir, de arriba abajo se encuentra la vena, luego la arteria y el más inferior es el nervio. Si se hace una punción a través de un espacio intercostal, deberá hacerse siempre cerca del borde superior de una costilla para evitar lesionar el paquete vásculo-nervioso intercostal.
Hay costillas verdaderas, falsas y flotantes.
• Costillas verdaderas: Son los 7 primeros pares de costillas. Se articulan con las vértebras y con el esternón y van aumentando de longitud de arriba abajo.
• Costillas falsas: Son los 5 pares finales. Se articulan con las vértebras y, o no se articulan con el esternón, o lo hacen indirectamente por medio del cartílago costal de otra costilla y van disminuyendo en longitud de arriba abajo.
• Costillas flotantes: Son los pares 11 y 12 que, por tanto, son, a la vez, costillas falsas y flotantes. No se articulan con el esternón ni directa ni indirectamente. Sus extremos anteriores son libres y terminan entre los músculos de la pared abdominal lateral.
El ángulo inferior de la escápula se encuentra a nivel de la 7ª costilla. Es, por tanto, buena guía para encontrar el 7º espacio intercostal.
Articulaciones del torax
Son muy importantes porque permiten el movimiento de las costillas y del esternón durante la respiración. Están moviéndose continuamente a lo largo de la vida de la persona, de modo que cualquier alteración que padezcan, interferirá con la respiración.
Articulaciones costo-condrales: en su extremo anterior cada costilla tiene una fosita para articularse fuertemente con un cartílago costal, formando una articulación fibrosa. Los cartílagos costales son barras flexibles de cartílago hialino que contribuyen a la elasticidad de la pared torácica.
Articulaciones inter-condrales: los cartílagos costales de los pares 8º, 9º y 10º, de costillas falsas, se articulan indirectamente con el esternón por medio del cartílago costal del 7º par de costillas. Son articulaciones sinoviales.
Articulaciones esterno-costales: Los 7 primeros pares de costillas se articulan con los bordes externos del esternón, por medio de los cartílagos costales. El primer par de cartílagos costales forman articulaciones cartilaginosas con el manubrio, mientras que los seis pares de cartílagos restantes forman articulaciones sinoviales con el cuerpo del esternón.
Articulaciones costo-vertebrales: la cabeza de cada costilla se articula con las caras articulares de los cuerpos de dos vértebras torácicas adyacentes por medio de una articulación sinovial y la tuberosidad de cada costilla se articula con la apófisis transversa de la vértebra torácica correspondiente también por una articulación sinovial. Las dos últimas costillas no se articulan con las apófisis transversas de las vértebras torácicas sino que lo hacen solamente con los cuerpos vertebrales y, por tanto, presentan movimientos más libres.
En una articulación sinovial las superficies articulares de los huesos, que están en contacto entre sí, están recubiertas de cartílago hialino, rodeadas por una cápsula fibrosa y diversos ligamentos, y lubrificadas por líquido sinovial producido por la membrana sinovial que tapiza la cara interna de la cápsula.
Arterias, venas y nervios intercostales en el tórax
Las arterias, venas y nervios del tórax forman un paquete vásculonervioso en los espacios intercostales, por eso reciben ese nombre. En la superficie interna del cuerpo de cada costilla y cerca de su borde inferior, se encuentra el canal costal por donde pasan la arteria, la vena y el nervio intercostales que acompañan a cada costilla y que se colocan según la regla nemotécnica: VAN (de arriba abajo: vena, arteria, nervio). Si se hace una punción a través de un espacio intercostal, deberá hacerse siempre cerca del borde superior de una costilla para evitar lesionar el paquete vásculo-nervioso intercostal. Las venas intercostales van a desembocar en la vena ácigos. Las arterias intercostales proceden, sobre todo, de la arteria aorta descendente y los nervios intercostales proceden de los nervios espinales torácicos.